En la actualidad existe una gran preocupación por la alimentación sana y equilibrada pero hemos olvidado algunos aspectos que son básicos a la hora de enseñar a nuestros peques a comer.
A menudo recibo en mi consulta a mamás y papás que están preocupados porque su peque come mal, no prueba la fruta, no come verdura y se niega a tomar leche.
Hemos de hacer un ejercicio de reflexión ¿ Es igual de importante que tome verdura y fruta mi peque a que yo lo haga? Y, ¿ Debo esperar a que sea más mayor para empezar a obligarle a comer ciertos alimentos?
Muchos pacientes dicen: «es que es muy pequeño, se enrabieta y prefiero no darle fruta, luego se la disimulo en triturados y papillas y ya está».
Hemos de saber que lo necesario se obliga y si para mi peque es necesario tomar fruta, verdura y leche a lo mejor tengo que obligarle, pues piensa que tendrás muchas ventajas:
– Es lo mejor para él o para ella.
– Previenes futuros problemas tales como estreñimiento, carencias vitamínicas…
– Fomentas su autonomía y mejoras su autoestima. El peque va comprendiendo que va siendo mayor y que come de todo como los mayores.
– El pequeño puede servír de modelo para sus hermanos.
Os propongo una serie de pautas para conseguir que vuestros peques vayan comiendo de todo:
– Muéstrale lo mayor que es, dile que si come va a hacerse fuerte como algún personaje que le guste.
– Introduce pequeñas cantidades del alimento que quieres que pruebe y ofrécele después más cantidad del que le gusta.
– Aumenta progresivamente la cantidad del que no le agrada y refuerza verbalmente elogiándole y diciéndole lo mayor que es.
– Utiliza pequeños refuerzos como un cromo, una pegatina de campeón o campeona y anímale a seguír probando alimentos.
– Hazlo partícipe en la elaboración de pequeñas recetas en las que incluyas alimentos que le gusten y alguno que no le guste haciendo formas divertidas. Por ejemplo dos croquetas combinadas con verduras que dibujen una cara. Juega a que comes los ojos, boca…
– Ignora las negativas a comer cosas y dile que qué pena que no se hará grande y que no podrá probar cosas muy ricas, y elogia cuando pruebe alimentos nuevos.
Con estos consejos seguro que algún alimento nuevo probará. Ahora te queda ser persuasivo, perseverante y explicarle que necesita comer de todo porque es bueno para la salud.
Autora: Pepa Fernández Avilés, Psicóloga clínica y educativa.